La liberalización de peajes multiplicará el tráfico pesado
Siguiendo el programa aprobado por el Gobierno de liberar las actuales autopistas de peaje, según vayan cumpliendo las concesionarias actuales, el 1 de septiembre le tocará el turno a los tramos de la AP-7 desde Tarragona hasta la frontera de la Junquera y la AP-2 entre Zaragoza y el Mediterráneo, que suman un total de 470 km más libres de peaje.
Por lo que respecta a la Ap-2, a su paso por Aragón, su liberación disparará el tráfico pesado por los 100 kilómetros que discurren entre Alfajarín y Soses, según los propios transportistas que opinan que el tráfico pesado alcanzará los 9.000 vehículos diarios, pues a los cerca de 3.000 que utilizan actualmente esta infraestructura se sumarán cerca de 6.000 que actualmente utilizan diariamente la N-II, una carretera que, recordemos, aparece sistemáticamente en los estudios sobre peligrosidad de la Red de carreteras como una de las más peligrosas de España.
Cerca de 6.000 tráileres se incorporarán a la Ap-2 a su paso por Aragón, mientras los transportistas hablan de falta de previsión por no desmantelar los peajes y no ampliar las plazas de las áreas de descanso.
La liberación por tanto ha sido bien acogida por los trasportistas que sin embargo ven cierta falta de previsión en la medida, fundamentalmente por dos motivos:
Que se liberalice el tráfico sin haber desmantelado previamente los peajes, lo que a su juicio, provocará cuellos de botella en los pasos.
Que no se hayan ampliado las plazas para el transporte pesado en las áreas de descanso. Por ello, se vaticinan graves problemas por falta de plazas en las zonas de descanso, que en la actualidad suman 180 en todo el tramo hasta Lleida.
Cuando el 1 de septiembre se alcen las barreras de los peajes, la mayor congestión de tráfico se registrará en el tramo aragonés. Al llegar a Fraga, una buena parte de camiones tomará la antigua autovía en dirección a Barcelona. Pocos optaban ahora por pagar los peajes. "Con casi 70 euros por trayecto entre Zaragoza y Barcelona, los viajes eran inviables", explicó Fernando Viñas, gerente de la Federación de Empresas de Transporte de Mercancías de Zaragoza (Fetraz). Con una excepción, los dedicados a mercancías peligrosas, que tienen la obligación de utilizar la autopista.
En la actualidad, el tráfico pesado solo supone un 30% del que registra la AP-2, 2.979 de los 9.978 vehículos que la utilizaron al día de enero a julio de 2021, según los datos facilitados por Abertis, concesionaria de la autopista. La Covid ha reducido los desplazamientos un 20% respecto a 2019, cuando se alcanzaron los 12.184 de media. Se observa una recuperación respecto a 2020, año en el que los confinamientos hicieron que se desplomara hasta los 7.664, 2.314 menos, con la caída de ingresos que implica.
Comments