Pausa del tacógrafo
Conducir durante períodos prolongados puede suponer un riesgo en la carretera. Un conductor a cargo de varias toneladas de mercancías o de medio centenar de pasajeros supone un gran riesgo si es víctima de la fatiga al volante. Para combatir esto, la normativa del sector incluye la obligatoriedad de tomar pausas durante la conducción ininterrumpida. A continuación, vemos qué son las pausas del tacógrafo y cómo tomarlas correctamente.
El concepto de “pausa” del tacógrafo se encuentra definido en el Artículo 4 del capítulo I del Reglamento CEE 561/2006 como “cualquier periodo durante el cual un conductor no pueda llevar a cabo ninguna actividad de conducción u otro trabajo y que sirva exclusivamente para su reposo”. También se indica que las pausas delimitan los periodos de conducción.
Con esta información, vemos que las pausas son un tipo de descanso obligatorio que deben tomar los conductores de vehículos con tacógrafo. Es un descanso más breve que el descanso diario, que marca el fin de un periodo de conducción continua y el comienzo del siguiente. Durante las pausas, el conductor no puede ni conducir ni realizar otros trabajos. La norma indica expresamente que las pausas sólo pueden usarse para descansar.
Pausa normal o fraccionada
Según el Reglamento mencionado anteriormente dice lo siguiente sobre cuando debe tomarse la pausa: “Tras un periodo de conducción de cuatro horas y media, el conductor hará una pausa ininterrumpida de al menos 45 minutos, a menos que tome un periodo de descanso”. “Podrá sustituirse dicha pausa por una pausa de al menos 15 minutos seguida de una pausa de al menos 30 minutos, intercaladas en el periodo de conducción, de forma que se respeten las disposiciones del párrafo primero”. Esta continuación es lo que habitualmente se llama pausa fraccionada.
Por tanto, la pausa del tacógrafo a la conducción debe tomarse tras un máximo de cuatro horas y media de conducción ininterrumpida.
Por otro lado, y dentro de este plazo máximo de cuatro horas y media, la pausa del tacógrafo podrá tomarse de dos formas:
Pausa normal. Deberá durar, por lo menos, 45 minutos ininterrumpidos. Durante esos 45 minutos no podrá moverse el vehículo ni realizar otros trabajos.
Pausa fraccionada. Deberá componerse al menos de un periodo de pausa de al menos 15 minutos, y a continuación otro de un mínimo de 30 minutos. Es muy importante que el orden de la pausa fraccionada sea siempre 15-30. De tomarse al revés, el tacógrafo no la registrará como pausa, lo que supondrá falta. Al igual que la pausa normal, la segunda fracción de esta pausa deberá tomarse antes de que venzan las cuatro horas y media de conducción continua para que se considere una pausa reglamentaria.
Yendo más allá de la normativa, la pausa del tacógrafo genera dudas en cuanto a cómo funciona en comparación con el resto de modos del aparato de control. A continuación, repasamos las posibilidades más habituales.
El modo conducción genera obligación de realizar pausas. Así, al pasar cuatro horas y media en conducción continua, los tacógrafos más modernos avisarán de que es necesario detenerse y tomar la pausa. Una vez concluya esta pausa, ya sea normal o fraccionada, el contador del tiempo que aparece en la pantalla del tacógrafo volverá a 0. Esto querrá decir que puede realizarse otro periodo de conducción continua de hasta cuatro horas y media.
El modo otros trabajos (o “martillos”, como se le conoce coloquialmente) no genera obligación de tomar una pausa, pero tampoco devuelve el contador a 0. Por tanto, si tras conducir se realizan otros trabajos, el tiempo permitido de conducción estará limitado, y habrá que tomar una pausa de igual manera. En algunos casos, el tacógrafo también avisará de que es necesario descansar durante el modo otros trabajos. La normativa del tacógrafo no indica que haya un máximo de tiempo que pueda pasarse con el tacógrafo en esta posición.
El modo disponibilidad no es ni trabajo ni descanso, ya que indica que el trabajador no está ejerciendo su labor, pero está disponible para retomarla en cualquier momento. Por tanto, se comporta de forma similar a los martillos. Sin embargo, existe una excepción: durante conducción en equipo, el segundo conductor podrá conmutar el tiempo pasado en disponibilidad por una pausa, para así aprovechar el tiempo disponible al máximo. En cualquier otra circunstancia, poner el tacógrafo en disponibilidad cuando corresponda hacer una pausa será un uso fraudulento del aparato de control, que se encuentra tipificado como falta en el baremo sancionador.
Comments